miércoles, 22 de agosto de 2012

El neutrino de verano IV



Fragmentos del libro

RECREACIONES CIENTÍFICAS
o
la física y la química
sin aparatos ni laboratorios
y solo por los juegos de la infancia

por Gaston Tissandier
traducida al español de la última edición francesa
por D. Eduardo Sánchez Pardo
MADRID
1884

(Existe una edición facsímil de 2010 de la editorial Maxtor)

[...] Pero una palabra, aunque sea griega, no es una teoría, y siempre es preferible confesar la ignorancia sobre un hecho determinado, que disimular esa ignorancia aparentando que se sabe. La ciencia, por otra parte, se ha enriquecido ya lo bastante, y puede manifestar resueltamente sus dudas é incertidumbres. Al observar la Naturaleza, muchas veces se improvisan ciertos experimentos, y hasta se obtienen resultados que luego se utilizan para diversas aplicaciones; pero suele suceder que el por qué y las causas de tal ó cual hecho permanecen ocultas durante mucho tiempo aun al ojo mas perspicaz y al mas claro talento. Es indudable que las maravillosas aplicaciones de la ciencia llaman nuestra atencion por la importancia de sus resultados y por los admirables inventos á que dan lugar; pero sí es cierto que se ha logrado sacar partido de los hechos observados, ¿puede acaso decirse por esto que conocemos las causas primeras de todas las cosas, el por qué de la Naturaleza? Seguramente que no. - Es preciso, por lo tanto, resignarse á confesar humildemente nuestra impotencia y decir como d'Alembert: "La Encilopedia es muy vasta; pero ¿de qué sirve ésta cuando no se conoce la materia de que se trata?"

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